Camuflados de plumas,
acechando.
Con el disimulo del sinverguenza,
(fiosofía de la escuela de gorriones).
Perros de mar,
zalameros;
mendigos de cierto ritmo polinésico.
Engullen,
engullen,
engullen,
intentando tragar
el saxo,
atrapado en el pescuezo.
****
(La pieza de la fotografía es obra del alfarero valdiviano Dagoberto Montecinos )
16 comentarios:
Me encantan se toman los lugares, se secan al sol, tienen vista al mar... encantador pajarraco...
emplumados besos
Me gusta la filosofía de los gorriones y me gusta como te describes y no me digas que no...
Y no te me pongas celoso que sabes que mi corazón sigue esperando, tambien despistado y disimulando, a que alguien lo robe.
y me pregunto...no será eso que tiene atrapado el pelíkano en el pescuezo?.
Tus dos y dos más y tiro porque me tocaaaa!!!.
Antonia:Sí,son como gatos.Me gusta la pinta de prehistóricos que tienen.
Besos.
María :¿Como me describo?já,ja.
¡Lodesmientorotundamente!.Igual me atrae la filosofía de los gorriones:Se las arreglan por estrecho que les hagan el mundo.
Este poema está dedicado a un músico saxofonista.La asociación fué inevitable para mí.
Los celos son una enfermedad,así que voy a necesitar,mucha,mucha terapia,je,je.
Besos.
Siempre me han parecido una imagen de señores de ese lugar marino, picotean donde quieren.
Cariños
Solo he tenido la oportunidad de verlos en el zoo, pero me encantan los pelícanos, y por el nombre que has tomado para tu blog a ti también... y mucho.
Felicidades al ceramista y al saxofonista, y a ti especialmente.
Un beso
Abuela ciber:"Señores",tú lo has dicho,como esos señores antiguos,solo les falta el reloj de bolsillo.
Abrazos.
CARMEN:Dado lo extenso de las costas de Chile,más de 4000 kms(todo el país),es cotidiano convivír con ellos,ya que se apersonan en los muelles de venta de pescado a disputarse con lobos y cormoranes lo que los pescadores arrojan al agua.Me fascinan sus modales,humor y desconfianza,y el vuelo y sus clavados en el agua,¡arrollador!.Si existe otra vida,eso me gustaría ser.
Besos.
Vi esos pelicanos bañados en petroleo que morian lentamente... casi muero de pena...
AOC.
Hola amigo, entre medio de tantos poetas no me aburro de leer lo que escribes y los comentarios que te dejan... me siento un pelícano!!
saludos rituales, Bocha.
Te dejo deseos de buena semana.
Cariños
Antonia:La culpa no es del petróleo.
Besos buches.
Bocha:Gracias ché.Ahí vamos afinando el verso.Por supuesto que eres un pelícano,uno motoquero.
Un abrazo.
Abuela ciber:Igualmente,buena semana,buen mundial.
Besos.
¡Más pelicanopitekus!... eso del saxo en el pescuezo es muy bizarro y lo del disimulo del sinverguenza muy cierto. Me gusta la obra de Don Dagoberto.
EVA:
¿Te refieres con lo de bizarro,a la palabra en su antigua acepción,o a lo que hoy se dá por bizarro?.
No olvides tener en cuenta de que este poema está dedicado a un saxofonista,(pudiera esta forma de expresión una clave),los pájaros solo detonaron el poema.
Besos.
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